¿Quién es ese extraño que siempre camina a tu lado?
Cuando cuento, sólo estamos tú y yo juntos
Pero cuando miro hacia adelante por el camino blanco
Siempre hay otro que camina a tu lado
Va envuelto en un manto de color marrón, con capucha
No sé si es un hombre o una mujer
Pero, ¿quién es ese que está a tu lado?
Durante la última etapa de su dramática expedición acaecida entre los años 1914-1917, Shackleton viajaba con otros dos compañeros, tratando desesperadamente de llegar a una estación ballenera británica. Estaban hambrientos, sin víveres, deshidratados, mal equipados, y a las puertas de la muerte.
Ernest Shackleton
Desde entonces ha sido llamada “el factor del tercer hombre” por parte de los investigadores, y ha sido experimentada por innumerables supervivientes en condiciones extremas de todo el mundo.
Por lo general ocurre cuando alguien se encuentra solo en una situación de supervivencia desgarradora, aunque a veces se trata de una experiencia compartida con otros supervivientes, como en el caso de Shackleton.
De todas formas, parece ser que esta presencia acostumbra a presentarse más comúnmente en casos de supervivientes solitarios.
A veces, el fenómeno se produce de esta manera. Sólo en forma de una sutil sensación de estar acompañado por alguien.
Pero, por lo visto, otras veces se puede llegar a oír a esa persona hablando con uno y animándole a no darse por vencido.
James Sevigny
Otras veces, esta presencia adquiere una forma más física.
Por ejemplo, cuando Peter Hillary estaba realizando una expedición al Polo Sur en 1998, afirma que en un momento determinado se vio acompañado por su madre, que había muerto en un accidente automovilístico 20 años antes.
La mayoría de las mentes científicas argumentan que estas apariciones no son más que un mecanismo de supervivencia propio de un cerebro al borde de la muerte, pero no le suceden a todo el mundo cuando se encuentra en una situación de peligro extremo y por lo tanto, no son un fenómeno natural de carácter cerebral, obligatoriamente común a todos los casos.
Parece que tiene una naturaleza diferente a la que mostraría un cerebro exhausto, inmerso en alucinaciones, y lo más curioso es que la mayoría de personas que lo han experimentado, afirman que el fenómeno les ha sido beneficioso.
En cuanto a otras explicaciones, habrá quien afirme que podría tener una naturaleza espiritual, tipo “ángel de la guarda”. Eso entrará dentro del campo de las creencias de cada uno.
Esta teoría sugiere que hasta hace unos 3.000 años, nuestros cerebros eran muy diferentes de como son ahora. El “hardware” del cerebro es el mismo, pero nuestra conciencia se ha estructurado de una manera radicalmente diferente.
Lo cierto es que esta es una teoría bastante extraña, pero si fuera verdad, entonces implicaría que aún hay restos de esa estructura mental acechando en nuestros cerebros modernos, que sólo aparecería cuando estamos inmeros en situaciones extremas de supervivencia.
Aparte de todo esto, no hay ninguna explicación científica concluyente que explique la síndrome del tercer hombre, que ha afectado a tantos supervivientes en todo el mundo.
Es bueno saber que si desgraciadamente nos vemos abocados a una situación de extrema supervivencia y experimentamos la Síndrome del Tercer Hombre, no estamos locos, sino que estamos experimentando lo que muchos otras personas han sentido a lo largo de la historia, y que por lo que cuentan en la mayoría de casos, ayuda a sobrevivir.
Fuente: asusta2.com.ar
ESTIMADOS HERMANOS:
ResponderEliminarSolicito confirmarme recíproco a la voluntad y al propósito de los demonios de la legion de Luzbel y de Azazel.
Atentamente:
Jorge Vinicio Santos Gonzalez,
Documento de identificacion personal:
1999-01058-0101 Guatemala,
Cédula de Vecindad:
ORDEN: A-1, REGISTRO: 825,466,
Ciudadano de Guatemala de la América Central.